Del 4 al 6 de Abril, se celebró en la ciudad de San Cristóbal en el Táchira, Venezuela, la Convención de Jóvenes 2012. Esta actividad fue de incalculable valor y enriquecimiento espiritual para mi vida.
Un pueblo anhelante y sediento de la Presencia y del poder de Dios se encontró con el agrado y la bendición del Todopoderoso que derramó su Unción en todos los cultos. El pueblo de Dios se fusionó con el Señor Jesucristo produciendo una armonía espiritual poderosa que le dio un toque especial a este magno evento.
Desde aquí quiero agradecer al Rev. Rómulo Vergara, Oficial Internacional del Movimiento Misionero Mundial, junto a su amada esposa Xiomara Vergara, así como los Oficiales de la Obra en el país y todo el Cuerpo Ministerial de Venezuela, qué bajo la Supervisión del Rev. Ricardo Manrique, me dieron una bienvenida muy calurosa que fue de calado profundo en mi corazón.
Me hicieron sentir como en casa, pude ministrar con toda libertad y disfrutar momentos muy agradables de compañerismo con los pastores y hermanos de las distintas congregaciones del Movimiento Misionero Mundial en Venezuela.
Un grupo hermoso de Pastores y hermanos de Colombia también asistieron a la misma, y fueron de inspiración para todos.
La Pastora Carmen Rodríguez de Colombia, ministró en la Convención de las Damas desde el lunes 2 en la noche hasta el miércoles 4 en la mañana, Dios la usó de una manera muy especial tanto entre las damas como los varones presentes.
Luego, siguió la Convención de Jóvenes de miércoles en la noche hasta el viernes en la mañana. La asistencia era alrededor de tres mil quinientas personas, los hermanos estuvieron asistiendo toda la semana de corrido en el Complejo Deportivo donde se dio la actividad
En el sentir de todos los presentes, definimos esta Convención de Jóvenes como de «Sabor Antiguo». Fue para todos una experiencia maravillosa.
Agradezco al Rev. Manrique y a su amada esposa por las atenciones recibidas, además de todo el Cuerpo Ministerial de Venezuela. A Dios sea toda la Gloria, Dios bendiga Venezuela.
Pastor Alberto Ortega